16.3.12

Nunca dejaría de columpiarte

+ ¿Qué te pasa?
- No sé como decírtelo...

+ Intenta explicarlo, o tampoco sabes, como de costumbre...
- Es difícil... Siéntate en el columpio, hazme caso, por favor. Solo así lo entenderás...
+ Ya estoy en el columpio, ¿ahora qué?
- Comienza a columpiarte, una vez cogido impulso cierra los ojos... ¿Notas esas cosquillas en el estómago? A mí no me hace falta columpiarme para sentirlas... Las tengo cada vez que te veo... Cada vez que me hablas.

+ Puf, de verdad... No sé que decir...
- No, pero aún no acaba. ¡No abras los ojos, sigue cogiendo impulso! Ahora suelta una mano...
+ ¿Qué? ¿Tú quieres matarme?
- Hazme caso, confía en mi. Suelta una mano...
+ ¡AAAHHH!
- ¿Has visto que sensación? Parece que te vayas a caer... Se te corta el aire y se te acelera el corazón... Eso me pasa cada vez que te separas de mí. Cada vez que te noto distante, o más cercano a ella.

+ Pero...
- No digas nada, no abras los ojos, déjame impulsarte y solo abre los ojos cada vez que estés arriba... Y mira al cielo ¿vale? Una, dos, tres y...
+ ¿Y esto? ¿Cuál es esta sensación?
- Solo contigo siento que toco el cielo... Siento que vuelo.
+ ¿Tanto me quieres?

- Nunca dejaría de columpiarte...


No hay comentarios:

Publicar un comentario